Lo que NO consideran los que votan por el SÍ (1/3)

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Muchas cosas se han dicho acerca de la revocatoria de la alcaldesa y regidores de Lima, tanto a favor como en contra de ella.  Sería muy largo y agotador hacer un análisis detallado de cómo es esta historia y de todos los factores que se pueden evaluar honestamente para decidir votar por SÍ retirar a la alcaldesa y todos sus regidores, o NO interrumpir su trabajo.
 

Entre los principales factores a favor de SÍ, los revocadores dicen que Susana Villarán es una persona incapaz de gestionar la ciudad. Ellos, como resumen para llegar a dicha conclusión, dicen que en estos dos años Susana Villarán no puede mostrar “obra emblemática” alguna, refiriéndose a que no hay obra de infraestructura que esta gestión haya proyectado, desarrollado y construido al 100%.  Como razones menores, pero igualmente cantadas por calles y plazas, están los deslices y torpezas cometidas por la MML, tales como la remodelación de la playa La Herradura, otrora popular y gran playa limeña para bañistas veraniegos, a la cual se le reconstruyó el malecón y sus servicios y mobiliario urbano, pero parte de la arena colocada fue rápidamente tragada por la primera ola grande que golpeó contra la playa.

 

Otras torpezas o deslices se refieren a la paralización del túnel que unirá las comunas de San Juan de Lurigancho y El Rímac a través de un cerro, así como el desborde del río Rímac en la construcción de “Vía Parque Rímac”. También se menciona su apoyo a la libertad, igualdad y dignidad de los homosexuales y prostitutas. Otro tanto se ha argumentado el accidentado primer intento de desalojo del Mercado Mayorista de La Parada, el cual dejó cuatro delincuentes muertos, saqueos, una yegua muerta y la humillación de la entera Policía Nacional. Además de su incapacidad, sus revocadores repiten insistentemente que es una persona ociosa. En resumen, bruta y vaga.

 

En la vereda de enfrente, estos argumentos se han revelado como medias verdades, manipulaciones malintencionadas y exageraciones traicioneras. ¿Cómo así?
 

 

OBRAS EMBLEMÁTICAS
 

El hecho que Susana Villarán no pueda mostrar una “obra emblemática” no debería sorprender en cualquier alcalde. En efecto, recordemos que en sus dos primeros años NINGÚN ALCALDE de Lima muestra una sola obra de esa clase.
 

Por ejemplo, las obras emblemáticas de los tres anteriores alcaldes fueron completadas al final del primer o a veces en el segundo período de gobierno, jamás a los dos años de gestión. Así, el Trébol de Monterrico del alcalde Belmont fue inaugurado en su segundo período. Por su parte, Andrade inauguró la Vía Expresa de Javier Prado al final de su segundo periodo. Asimismo, Castañeda hizo el Metropolitano y todos sus intercambios viales en su segundo período; apenas la Vía Expresa de Grau fue inaugurada en su cuarto año de su primer gobierno.

 

 

TORPEZAS Y DESLICES
 

Los revocadores se ha solazado en la arena perdida en La Herradura cuando la MML remodeló el balneario y colocó dicha arena para recuperar algo de la playa. Se insiste maliciosamente solo en la arena perdida ignorando deliberadamente que la obra no es esa sino la remodelación del balneario y el malecón. Vea detalles aquí: http://diario16.pe/noticia/12999-la-verdadera-historia-de-la-herradura

 

En cuanto al túnel de SJL y El Rímac, llamado Santa Rosa, debemos tener la madurez de entender que el derrumbe ocurrido no puede implicar simplemente limpiar e inaugurar. ¿Pudiéramos imaginarnos un nuevo derrumbe mientras el túnel está en pleno funcionamiento? Por la gravedad de esto, el proyecto tenía que reformularse y no continuarse. “Reformular” significa diseñar los túneles nuevamente, empezar de cero porque los túneles estaban mal diseñados. Esto, evidentemente, toma mucho tiempo y dinero, pero de por medio están las vidas de miles de personas, muchas de las cuales probablemente van a votar por el SÍ porque creen que las cosas se pueden hacer simplemente empujándolas, priorizando sus tiempos más bien que su calidad. Hoy, tras varias complicaciones adicionales, la conclusión de la obra está en licitación: http://www.larepublica.pe/10-01-2013/habra-nueva-licitacion-para-concluir-tuneles-de-santa-rosa-y-san-martin

 

La torpeza en las comunicaciones de la MML se puso de manifiesto cuando el río Rímac invadió la construcción del túnel bajo el río en “Vía parque Rímac”. Al igual que en el caso anterior, esta obra vial es heredada de la gestión anterior, aunque con algunos replanteamientos que le agregan un componente ambiental, recreativo y paisajístico que la hacen más cara pero más completa.  La torpeza de la MML, insisto, está en las comunicaciones, no en la obra en sí misma. La empresa constructora ha tenido errores al planificar la contingencia de la crecida del río, pero la MML cometió el error de comprarse pleito ajeno. Pero este no es un error de fondo sino de formas. La explicación técnica es tardía, y por más que los costos materiales son completamente asumidos por la constructora, los revocadores intentan soliviantar a la población para que linche a la alcaldesa.
 

Apoyar abiertamente las libertades civiles e individuales, tales como la libertad sexual, la prostitución formal, ser antirracista, etc. ha hecho que la profunda hipocresía derechista aflore contra la alcaldesa izquierdista. Para esta derecha retrógrada, es insoportable la convivencia pacífica con prostitutas formales, homosexuales, lesbianas, bisexuales, transexuales y cualquier cosa que les arruine su paisaje conservador, blanco y típico de tarjetas de navidad.
 

La doble moral se pone de manifiesto también en el desalojo de La Parada. A pesar de que ha quedado demostrado que la violencia fue organizada delictivamente por los desalojados, quienes contrataron pandilleros y toda clase de lumpen para masacrar a los policías, los revocadores buscan lo malo en lo bueno. En efecto, dicen ellos que la alcaldesa es responsable de cuatro muertes, pero no dicen que esos cuatro muertos eran experimentados delincuentes que buscaron lo que encontraron. En cualquier parte del mundo, los responsables de los delincuentes muertos en acción son los propios delincuentes, nunca la policía ni la municipalidad ni el presidente de la nación. Aun en tal caso, la MML pidió el apoyo técnico y profesional de la Policía Nacional, por lo tanto, la ejecución de ese aspecto práctico es competencia de dicha institución, no del municipio. Una vez más, las medias verdades y la manipulación de los revocadores muestran su verdadera entraña.

 

 

¿OCIOSA?
 

El único que nunca se equivoca es el que nunca hace nada. Y Susana Villarán no se ha equivocado tanto ni es ociosa. ¿Acaso pueden creer que en este minuto que leemos esto ella está rascándose la ingle? No, eso es inaceptable, es evidente que están mintiendo. Es cierto que Lima necesita obras de infraestructura, pero lamentablemente las obras de la gestión anterior no han sido hechas en el marco de un gran plan de desarrollo de la ciudad. Las obras de Castañeda fueron tan buenas como aisladas, por lo cual no había nada planificado ni desarrollado después de él, lo cual obliga a esperar a que la nueva administración empiece de cero sus nuevos proyectos, aparte de las obras heredadas. Como resultado, en estos dos años no podemos ver nuevas obras inauguradas sino en proyección, como ya les he explicado que les ha ocurrido a todos los alcaldes anteriores. Estos nuevos proyectos pueden verse en la web de la MML (www.munlima.gob.pe), por ejemplo, Vías Nuevas de Lima: http://www.munlima.gob.pe/proyecto-vias-nuevas-de-lima
 

Aunque yo no esté del todo de acuerdo con su estilo, y de hecho no voté por ella, tengo que aceptar sin dolor ni pena que Susana Villarán sí es una mujer honesta y trabajadora, aunque le esté costando superar sus propias limitaciones, las cuales, por cierto, eran bien conocidas por todos los votantes cuando fue elegida. No hay, por lo tanto, una razón de suficiente peso para someternos al trastorno de tener tres alcaldes en estos dos últimos años de gestión.

 

En la segunda parte, La Sala de Ensayo hará una breve pero sentida revisión de los personajes en torno a la Revocatoria. Nunca está de más saber quién es quién en este proceso.