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Hay un par de razones que no he
visto que se haya tratado en el tema de la revocación a Susana Villarán y todos
sus regidores, pero que espero que, de un modo u otro se trate abierta y
francamente. Si aún usted cree que con el SÍ le hace un bien a la ciudad y a
los limeños, le pido que agregue a la balanza lo siguiente:
1: LIMA COMO DISTRITO
Usted, amigo lector,
probablemente no viva en el Cercado de Lima, sino en Miraflores, Comas, Jesús
María, San Miguel o cualquiera de las decenas de distritos que existen en Lima aparte
del Cercado. Sin embargo, como miles de limeños, yo vivo en el Cercado de Lima (en
la Unidad Vecinal de Mirones, para ser exacto).
El Cercado de Lima: Los demás distritos deciden su futuro sin ensuciarse. |
Esto marca la diferencia de una
manera vital: Si revocan a Susana Villarán, usted de todas maneras mantendrá su
alcalde distrital, es decir, que sus necesidades cotidianas y básicas, tales
como recojo de basura, control de ambulantes, serenazgo, etc. seguirán
sosteniéndose sin cambio alguno.
Pero para quienes vivimos en El
Cercado la revocación de Susana Villarán será al mismo tiempo la revocación de
nuestro alcalde distrital, es decir, no tendremos autoridades para atender las
cosas elementales y corrientes del párrafo anterior.
Por lo tanto, los demás de los
limeños están tomando una decisión que traerá consecuencia principalmente para
nosotros los de El Cercado. Y somos minoría pese a ser los más afectados con la
decisión. Es como si yo, de El Cercado,
votara la revocación del alcalde de La Victoria, con la seguridad de que mis
propios servicios se mantendrán sin alteración. ¿Le parece justo?
Este no es un asunto de poca
monta. Recordemos que si la revocación prospera en todos los alcances esperados
por sus promotores, el siguiente alcalde será el primer regidor no electo por
el partido de Susana Villarán. Si le achacamos verazmente a ella y sus
regidores que son improvisados ¿se imaginan cuán improvisado es el número 22
que no fue elegido? Y ese tipo se hará cargo, le guste o no a él, del
presupuesto y proyectos de nuestra ciudad (y distrito) durante los meses que
tome la campaña electoral para el siguiente alcalde, el cual solo completará el
periodo revocado, es decir, unos cuantos meses más. ¡Tres procesos electorales
y tres alcaldes en apenas dos años!
Invoco a quienes voten por el SÍ
a que dejen a un lado su aversión por los izquierdistas y comunistas, y se den
cuenta de que ese remedio es mucho peor que la enfermedad. Si la elección de
Susana Villarán fue mala, revocarla será peor, mucho peor. No les pido que
voten por el NO pensando en que Susana Villarán es buena alcaldesa, porque yo
tampoco creo que sea tan buena; les pido que tengamos la madurez de asumir el
costo de la elección que hicimos aunque hayamos votado por otra persona.
Este linchamiento solo hará que
nos hundamos cada vez más en el desorden y la inmadurez de cambiar de alcalde
como si fuera calzoncillos. Como muestra un botón: Hay poblaciones del interior
del país cuyos alcaldes hace muchos años que no completan su mandato, debido a
que los perdedores organizan revocaciones apenas terminadas las elecciones, una
y otra vez. Esto me lleva a la segunda cuestión que no se ha tocado hasta
ahora: Los números manipulados.
2: MANIPULANDO ESTADÍSTICAS
La barra verde es mayoría simple, lo que significa que, a la vez, todas las demás son mayoría absoluta. |
Susana Villarán fue elegida en
noviembre de 2010 con el 38.393% de los votos, según la ONPE. Después de un inicio muy bajo con menos de
15% de aprobación en un par de meses de gestión, hoy, a inicios de 2013, Susana
Villarán muestra un 32% de aprobación a través del apoyo al NO, según la última
encuesta publicada por IPSOS el 20 de enero.
Es decir, en términos netos, ella apenas ha bajado 6% desde el día de
las elecciones, más aun, muestra una tendencia creciente, aunque efectivamente
lenta.
Pero a lo que quiero llamar la
atención es lo que todo esto implica: Aun si Susana Villarán mantuviese el 38%
que obtuvo para ganar la alcaldía, ella perdería la revocatoria. Esto es un
absurdo que no puede permitirse. Por eso las revocatorias son una plaga en todo
el país, porque con 38% de votos en la elección ya están dadas las condiciones
para revocar al elegido desde el primer día de su trabajo, ya que el 62% de los
votantes no votó por él. Solo se trata de que sus detractores sean astutos y
bien organizados, cualidades que Marco Tulio Gutiérrez y sus acompañantes
tienen de sobra. No tengo que volver a mencionar a sus impresentables socios.
Un ejemplo claro de mal uso de la estadística. |
Así, no se necesita mayor razón
que la impopularidad del alcalde para sacarlo desde el primer día de su
gestión. No importa si tiene poco tiempo, no importa si no mintió en campaña,
no importa si su improvisación era bien conocida por todos los votantes, no importa
si no ha cometido delito ni ninguna falta moral. Al ser elegido con 38% de
votación es suficiente con la maldad de los vencidos y la inmadurez de los
votantes para que sea expulsado del cargo.
¿No es evidente que se está
manipulando una torpe ley para provecho de la venganza política, de nuestra
consabida falta de compromiso y de la morbosa inclinación popular hacia el
linchamiento público?
VOTE POR EL NO
¡No se deje manipular por los corruptos! |
Amigo lector, le pido encarecida
pero enérgicamente que no apoye esta maliciosa forma de manejar una ley mal
hecha. Le pido seriamente que tome decisiones con madurez. La razón recomienda y exige que sepamos asumir el
compromiso tomado de cuatro años si no hay razones extraordinarias que
justifiquen nítida y objetivamente una ruptura.
Lo digo sin haber votado por Susana, habiendo hecho campaña contra
ella y sin querer decir que sea buena alcaldesa, pero teniendo en mente que
nada de eso justifica el enorme daño que nos hacemos nosotros mismos por mera
antipatía antiizquierdista.
Falta un poco más de un mes para
el 17 de marzo, fecha en que votaremos la revocatoria. Aún hay tiempo para que
usted decida sabiamente votar por el NO. Por favor, difunda las razones
expuestas en esta serie de La Sala de Ensayo, especialmente en esta última
parte. Deje que Susana Villarán y sus regidores completen su mandato y entonces
vote por otro, no la reelija en las siguientes elecciones de 2014 si no la
aprueba, pero no rompa hoy innecesariamente la decisión de la elección de 2010.
No contribuya al golpismo legal.